Alburquerque
En 1924 el castillo de Alburquerque fue declarado de Interés Artístico, como lo fueron en 1933 el conjunto urbano y sus murallas, conservándose dos puertas de acceso al recinto, la de la Villa y la de Valencia.
De origen prehistórico, como demuestran varios abrigos con pinturas rupestres en el Risco de San Blas, declaradas Monumento Nacional, su población se establece de forma permanente en el siglo XII. Los árabes le dieron el nombre de Abu-al Qurq, país de los alcornoques. Cuenta, ademas, con interesantes muestras de tumbas antropomórficas.
En el último cuarto del siglo XIII se construyen las murallas. En lo más alto de la villa destaca la mole del castillo, con una torre del homenaje de cinco pisos.
La fortaleza la mandó construir, en 1314, Alonso Sánchez, hijo bastardo del rey Dionís de Portugal, que era el señor de la villa. Cuarenta años más tarde lo sitió Pedro de Castilla, más conocido como Pedro I el Cruel. Con el tiempo perteneció al condestable Álvaro de Luna y posteriormente a Enrique IV, que encumbró el señorío en Ducado de Alburquerque, y donó el castillo al maestre de Santiago Beltrán de la Cueva, quien se decía que era padre de Juana la Beltraneja, la que disputó el trono de Castilla a su tía Isabel la Católica.
En las afueras de la fortaleza, se encuentra el templo de Santa María del Mercado, del siglo XV. El nombre lo recibe por el mercado que se celebraba delante de su puerta principal. Otros monumentos son la iglesia parroquial de San Mateo, siglo XVI-XVII, el Convento de la Madre de Dios y la Iglesia de San Francisco.
En Alburquerque se puede disfrutar en el verano de celebraciones como el festival de música independiente Contem-pop-ránea, en el mes de julio, referente de ámbito nacional. A mediados de agosto se celebra el Festival Medieval, declarado Fiesta de Interés Turístico Regional. También en los alrededores del castillo, en Semana Santa, se recrea una Pasión viviente, mientras que el día 7 de septiembre todo el pueblo sale en romería al santuario de la Virgen de Carrión, patrona de la localidad.
Sus rutas de senderismo, homologadas por la FEDME, son Carrión-Los Riscos, Sierra de Santa Lucía y Sierra de los Picorros, Castillo de Azagala y Ciudad Dormida.